20.1.05
Líneas de expresión
Cual mujer de campo, joven aún pero con arrugas prematuras por el polvo del desierto, mi ciudad crece expandiéndose hacia un espacio infinito. Fraccionamientos nuevos aparecen junto a las recién envejecidas colonias y en cada semáforo, por medio de algún signo, reflexiono en la huella que han dejado otros y en la que yo dejaré como parte de este pueblo del mundo. Cada espacio muestra un mensaje recordándome que pasar no es suficiente, que vivir no es suficiente, que trabajar no es suficiente.
No es Juan que perpetúa su amor por Lucía con fotocopias impresas en papel de colores, ni la fe en la Virgen de Guadalupe que se repite en cientos de murales. Tampoco el nombre grafiteado con aerosol por un adolescente resentido.
Es resistirse a ser ignorados?
No sé.
Es como una antigua necesidad de difundir nuestras vidas en los espacios del tiempo.
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1 comentario:
Ese ese deseo de trascender que nos lleva a expresarnos ante el mundo que a veces no quiere escuchar y que otras tantas tristemente no sabe como hecerlo.
Es ese deseo de dejar huella y sentir que nuestra existencia ha servido para algo.
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